“China me ha enriquecido la mente”

2023-07-05 10:37PorZHANGDONGHAN
今日中国·西班牙文版 2023年7期

Por ZHANG DONGHAN*

● Fecha: 13 de mayo de 2023

● Lugar: Santiago de Chile,Chile

Marcos Barraza Gómez, exintegrante de la Convención Constitucional de Chile

Marcos Barraza.Foto cortesía del entrevistado

COMO miembro del Comité Central del Partido Comunista de Chile,Marcos Barraza Gómez fue también integrante de la Convención Constitucional de Chile, además de ministro durante el segundo gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, siendo uno de los primeros comunistas en llegar a La Moneda desde el golpe de Estado de 1973.Fue director de la Escuela de Psicología de la Universidad de Santiago de Chile, una de las más prestigiosas del país, y se ha dedicado también a la promoción del intercambio académico a servicio del desarrollo social.

En mayo pasado visitó por primera vez China para asistir al Encuentro entre Jóvenes de China y América Latina 2023.En diálogo conChina Hoy, Marcos Barraza comparte sus experiencias como militante comunista, sus opiniones en cuanto al proceso de desarrollo de Chile, así como las impresiones que le ha dejado China.El político y académico chileno dirige la mirada hacia el porvenir del codesarrollo entre los países y nos presenta sus planes para fomentar las relaciones entre universidades e institutos de ambas partes.

China Hoy (CH): Usted es miembro del Comité Central del Partido Comunista de Chile.¿Cuándo, cómo y por qué eligió el camino del comunismo?

Marcos Barraza Gómez (MBG):Hago míos los principios doctrinales, filosóficos y orgánicos del Partido Comunista de Chile desde temprana edad porque soy hijo y nieto de luchadores sociales, de un matrimonio comunista que está en la lista de prisioneros políticos de la Comisión Valech.Por tanto, es parte de mi herencia la convicción de luchar por un futuro mejor para la clase trabajadora.

Marcos Barraza en el Encuentro entre Jóvenes de China y América Latina 2023.Fabián Pizarro

En términos bien sustantivos, he visto que las principales transformaciones en materia de bienestar y felicitad que ha experimentado la sociedad chilena han sido a partir del impulso del Partido Comunista a las luchas sociales y políticas, de su combate férreo a la dictadura.Esto me hace sentir la necesidad de ser partícipe de un proyecto transformador y emancipador, con soberanía para el pueblo de Chile, guardando estrecha relación con el fin último del Partido Comunista de Chile, el cual consiste en reconocer en trabajadoras y trabajadores a los motores de las transformaciones sociales.

CH: Usted fue uno de los primeros comunistas en llegar a La Moneda desde el golpe de Estado de 1973.¿Qué metas tenía cuando se desempeñó como ministro? ¿Se encontró con dificultades al realizarlas?

MBG:En la elaboración del programa de gobierno de la presidenta Bachelet se establecieron cuatro transformaciones sustantivas.Primero,la reforma laboral que buscaba una redistribución vía negociación colectiva.Segundo, la reforma tributaria según la cual las grandes empresas y los superricos tributarían mucho más.Tercero, la reforma en materia de sistema electoral que permitiera terminar con el sistema binominal que impedía la participación de fuerzas políticas como el Partido Comunista.Y cuarto, la reforma de la gratuidad en la educación superior, que logró implementarse hasta el gobierno de la presidenta Bachelet.En el fondo, eran todas reformas que perforarían la institucionalidad neoliberal.

Materializar estos cambios conllevó serias dificultades porque contravenían una forma de administración gubernamental basada en un Estado subsidiario, en parámetros de gobernanza que limitaban la capacidad de acceso al bienestar a grandes sectores de la población, así como en una institucionalidad que desafectaba el estado de las decisiones estratégicas.Cambiar esos principios en la toma de decisiones tuvo un costo político alto, que implicó, entre otras consecuencias, la desafección de los sectores de centro o moderados presentes en el Gobierno y la pérdida de mayorías en el Congreso.

Sin embargo, mirado con perspectiva, fue asertivo haber insistido en esos cambios, ya que, al ser materializados,generaron una mejor calidad de vida para vastos sectores de la población.Y ellos también fueron el punto de partida para un conjunto de reformas que han marcado las exigencias populares en Chile, desde el gobierno de la presidenta Bachelet en adelante.

“Chile y China enfrentan los mismos desafíos del mismo objetivo, que consiste en lograr el bienestar compartido para su población.En este sentido,planteamos el desarrollo y uso de las nuevas tecnologías desde la misma óptica, pensando en la distribución y la redistribución del conocimiento”.

CH: La nueva Constitución de Chile atrae mucha atención en China.Desde el punto de vista de un exintegrante de la Convención Constitucional, ¿nos podría compartir la actualidad de este proceso? En su opinión, ¿cómo debería ser la nueva Constitución?

MBG:Chile necesita una nueva Constitución.El texto constitucional vigente,mayoritariamente percibido como obsoleto, opera como una camisa de fuerza que limita el ejercicio pleno de los derechos individuales y colectivos, particularmente de las personas más vulnerables,quienes están sometidas a la suerte de la locura de sus bolsillos o del mercado.También resta protagonismo al Estado en la vida económica del país, mirando y privilegiando la provisión exclusivamente a través de los privados de los bienes y servicios públicos muy demandados en Chile, como la educación, la salud, la vivienda o la seguridad social.

Bajo este contexto, es necesario el cambio de la Constitución por un texto que habilite la concreción de un Estado social y democrático de derechos, lo cual consiste en un modelo que anteponga la persona al mercado y coloque los derechos por sobre la política de lo privado.Lo plausible será lograr una Constitución habilitante para la próxima legislatura de aquellas materias que son esenciales para viabilizar política e institucionalmente el Estado social y democrático de derechos.No debemos profundizar ni menos constitucionalizar el principio de subsidiariedad que resta incidencia al Estado en la obtención de bienes de bienestar para la población.Y hemos de avanzar en algo que es determinante en soberanía económica, que permita sostener el incremento de la calidad de vida para vastos sectores de la población.

Hemiciclo utilizado por la Convención Constitucional para sus sesiones plenarias en Chile.Convención Constitucional

CH: Usted ha sido presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago de Chile y posteriormente director de la Escuela de Psicología de dicha casa de estudios.¿Cómo ha sincronizado su trabajo académico con su labor en el partido?

MBG: La sincronía se establece a partir de las convicciones que profeso.Es decir, si bien cumplo funciones académicas, como académico de la Universidad de Santiago de Chile, y he cumplido roles de director de escuelas, en este caso de la Escuela de Psicología, los principios que rigen mi labor como trabajador académico son los mismos que pienso en mi trabajo político cuando se ha cumplido una larga trayectoria política con responsabilidades muy diversas.La información de todo ese trabajo se logra a partir de la convicción y de la certeza de que el conocimiento también puede ser redistribuido en la población.Así como soy partícipe de la transformación de los procesos sociales en el país, soy al mismo tiempo partícipe de la transformación de la universidad para que esté al servicio del desarrollo nacional.

CH: Usted ha venido de viaje a China.¿Podría contarnos cómo se ha sentido?

MBG:China me ha enriquecido la mente como partícipe de la transformación desde el punto de vista de asimilar una práctica ideológica y doctrinaria que cuenta con la capacidad de interpretar y reinterpretar el marxismo en función de la realidad contemporánea.Durante el viaje, conocí las características del modelo chino,particularmente cómo se expresa en términos culturales, políticos, sociales y el socialismo con peculiaridades chinas de la nueva era y, en definitiva,cómo se organiza también el Partido Comunista de China en términos de sus bases y su estructura.

Creo que Chile y China enfrentan los mismos desafíos del mismo objetivo,que consiste en lograr el bienestar compartido para su población.En este sentido, planteamos el desarrollo y uso de las nuevas tecnologías desde la misma óptica, pensando en la distribución y la redistribución del conocimiento,así como las amenazas que surgen de nuevas y mortales enfermedades,campo en el que también la ciencia y la tecnología ofrecen una solución conjunta.Ambos países tienen que adoptar una estrategia común para enfrentar el cambio climático y sus severas implicancias.Estamos enfrentando la urgencia de ir diseñando formas de economía circular que permitan sostenibilidad y sustentabilidad ambiental en base a un neodesarrollismo que asegure los crecientes niveles de calidad de vida.

Por tanto, es muy valioso poder profundizar una diplomacia para la paz entre los pueblos que permita traspasar experiencias virtuosas en materia de desarrollo, pero, a su vez, incrementar la paz mundial.

CH: ¿Cómo vislumbra el porvenir de las relaciones entre China y Chile?

MBG:Hace poco celebrábamos los 50 años de relaciones diplomáticas entre nuestras naciones.Esa relación política hoy se nutre en diversos ámbitos y debe seguir robusteciéndose y profundizándose en ambas orillas del océano.Para eso, hemos de indagar, conocer y profundizar en las variables culturales y políticas en la dimensión idiosincrática de cada pueblo, a fin de entender en qué se sustentan las políticas sociales y las políticas públicas exitosas, lo cual es fundamental.

Personalmente, ya tengo planeadas formas para abrir oportunidades de intercambio académico y político muy significativos.La Universidad de Santiago de Chile está en condiciones de generar intercambios académicos que sean provechosos para ambos países.Estamos abiertos a programas y proyectos de intercambio de conocimiento, de estudiantes o de docencia, y esperaría que a través de todo eso, podamos profundizar en la comprensión y el análisis sobre China en Chile y, al mismo tiempo, contribuir desde Chile a que China conozca mucho más sobre nuestro país.